Meditación Vipassana

Aún no hace un mes que volví de mi primer retiro de meditación Vipassana, una de las meditaciones más potentes que conozco. No te voy a contar cómo me sentí, sino la teoría de la técnica de esta meditación, para ver si tú que tanto miedo tienes a este tipo de retiros, te animas, y te lanzas a la maravillosa aventura de pasar tiempo contigo mismo.

Te contaré que se trata de una meditación centrada en las sensaciones corporales, ir haciendo a la mente cada vez más sensible. No importa lo que percibas, una sensación más sutil, una más intensa, pasarás por tu cuerpo una y otra vez, lo recorrerás de principio a fin, de arriba a abajo, de abajo a arriba, una y otra vez.

Y mientras tanto, tu mente se irá haciendo más receptiva, y el señor S.N. Goenka, el maestro, irá explicándote cómo ir deshaciéndote de la desdicha. Mantener la ecuanimidad en todo momento, evitando sentir aversión por las sensaciones conocidas como negativas, y evitando sentir apego o avidez por las que nos parecen positivas, manteniendo a la mente solo observando, sin juzgar lo que recibe. Poco a poco, la desdicha va desapareciendo y va quedando un estado de tranquilidad y paz, un estado lleno de felicidad.

Al fin y al cabo, todos los seres queremos ser felices. Las sensaciones no se pueden evitar, tampoco se pueden buscar, o invocar, pero lo que sí que podemos hacer es aprender a no reaccionar, manteniéndonos firmes, y centrados.
La aversión nos lleva a un estado de negatividad, diciéndonos que algo no nos gusta, que lo detestamos, que lo odiamos incluso, lo que nos llena finalmente de desdicha. El apego nos hace sufrir pensando que esto que poseemos lo podemos perder, o que ya no nos satisface y necesitamos más, la cual cosa nos lleva al mismo punto, a la desdicha.

Observar las sensaciones del cuerpo manteniendo la ecuanimidad, nos entrena para ser más felices en nuestras vidas. Sí, en nuestras vidas comunes, la mente se acostumbra a ver la impermanencia de todas las cosas, tanto de las buenas como de las malas y aprende a no aferrarse a las emociones extremas.

¿Te enfadarás? Seguramente, pero a medida que sigas practicando, si lo estás haciendo bien, tus enfados durarán menos, serán menos intensos, y cada vez aparecerán con menos frecuencia. Y también sabrás cómo disfrutar de las cosas buenas de la vida, sin contaminarlas con los temores mentales de la pérdida o de la permanente necesidad.

Dhamma Sacca

Practicando meditación vipassana serás más feliz. Sí, lo afirmo desde el conocimiento que me ha dado la propia experiencia. Primero, como dice Goenka, oí hablar de la técnica, y me llamó la atención, después la intelectualicé y me pareció que tenía sentido y finalmente la experimenté, la viví y la integré. Y ahora lo comparto con total confianza y determinación.

De las cosas más bonitas que me llevé fueron todas las horas conmigo misma, observando todas mis perfectas imperfecciones, todas mis conversaciones mentales infinitas, todas mis historias, y amándome y aceptándome tal cual soy. Con mis luces y mis sombras. Y después comprobar, cuando pude hablar, que las demás personas son iguales a mí, que todas estamos en un camino de autodescubrimiento, que todas queremos la felicidad.

Si tú también quieres ser feliz, no lo dudes, busca unos días para ti. Pincha en el link  organización dhamma y comienza tu propia aventura.

Te contaré todos los detalles prácticos en una nueva entrada, estate atento, en unos días lo publico.

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